Batman: Año Uno, de Frank Miller y David Mazzuchelli
¿De qué va?
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Batman Año Uno básicamente recrea el mito de Batman desde una perspectiva contemporánea. El cómic narra dos historias simultaneas que se entrecruzan: por un lado, cómo un joven Bruce Wayne de veinticinco años adopta la personalidad de Batman y da sus primeros pasos como hombre murcielago, y por otro la llegada del teniente James Gordon a la corrupta policía de Gotham City y cómo se hace un lugar en la ciudad. El relato nos muestra la evolución de ambos protagonistas a lo largo de once meses de forma paralela; cómo Batman inicia su cruzada y comete sus primeros errores y aprende de ellos, y cómo Gordon intenta mantenerse íntegro y se enfrenta no solo al abundante crimen que infesta la ciudad sino también a la corrupción de sus propios compañeros, mientras intenta mantener una vida con su esposa en una ciudad de locos. Dos protagonistas y dos historias entrelazadas que desde el principio están destinadas a encontrarse.
Sobre el cómic
Batman Año Uno, con guión de Frank Miller y dibujo de David Mazzucheli, se publicó originalmente entre 1986 y 1987 en los números 404 a 407 de la serie regular Batman, aunque está planteada como una lectura totalmente independiente y autoconclusiva. Está considerada unanimemente como la mejor historia de Batman jamás realizada, junto con el Batman: el regreso del caballero oscuro. Ambos cómics fueron realizados por Frank Miller, que El regreso del caballero oscuro narra en solitario el regreso de un batman crepuscular, y poco después mostró en Año Uno con dibujos de Mazzuchelli los inicios del personaje como justiciero enmascarado.
Durante una temporada se comentó insistentemente sobre la posible realización de una película basada en el cómic, dirigida por Darren Arafnowsky (Pi, Requiem por un sueño) y cuyo guión estarian escribiendo Arafnowsky y el propio Miller. Tanto el director como Miller confirmaron que el proyecto llegó a la fase de realización del guión, pero finalmente sería aparcado por la productora, pero bastantes aspectos de Batman: Año Uno aparecerían tiempo después en la película Batman Begins.
Edición española
Después de que Norma Editorial editara el cómic en un bonito tomo de tapa dura en 2002, la más reciente edición española (y única edición disponible actualmente), es la publicada por Planeta-DeAgostini en 2005, como Coleccionable Batman #1: Año Uno, primera entrega de un coleccionable de kiosko lanzado con motivo del estreno en cines en España de Batman Begins. Esta edición, aunque mucho menos cuidada (tapa blanda, diseño de cubiertas), tiene un precio imbatible de solmamente 1,00 € por un cómic de 96 páginas a color. Una oferta que se produce por la típica oferta de lanzamiento los coleccionables de kiosko, y que lo convierte en un cómic de lectura inexcusable para cualquier aficionado al cómic que quiera ampliar sus lecturas.
Galería
La palabra de la crítica
"Año Uno reune a Frank MIller junto a un David Mazzuchelli en estado de gracia. El primero -entonces en una de sus cimas creativas- conjuga elementos de género negro y corte naturalista (en el mejor sentido) para narrar los inicios del Hombre Murciélago, pero prestando igual importancia al Teniente Gordon y potenciando los secundarios, capaces de ser definidos con apenas un par de diálogos. Por su parte, Mazzuchelli, poseedor de un dominio pasmoso del dibujo y de los resortes narrativos, realiza un trabajo deslumbrante. Con un ojo puesto en el trazo sintétido de Alex Toth, recoge las propuestas de Miller y amplifica sus virtudes en lo que quizá sea su mejor trabajo como dibujante hasta la fecha. Año Uno supuso otro de los empujones que necesitaba Batman para recuperar su estatus de mito, tras la desorientación de los primeros años 80. Fue, además, la versión definitiva del origen del personaje, y dio pie a que numerosas obras batmanianas posteriores intentaran seguir sus pasos. Extraordinaria, llena de emoción e imitada hasta la saciedad, Batman Año Uno es un tebeo imprescindible. De verdad."
-- Ernesto Martínez, Volumen Dos #5
"Batman Año Uno influirá decisivamente en la visión que a partir de entonces se tendrá del hombre murcielago, tanto literaria como gráficamente. El trabajo de David Mazzuchelli es soberbio, posiblemente el mejor trabajo de su carrera. A las virtudes que ya hacía gala (narración precisa, composición elegante, dominio del dibujo realista) se suma ahora el afán por conquistar nuevos terrenos: la línea y la mancha se vuelven rotundas, más sintéticas, y el estilo cambia para adaptarse a la historia, lo que se convertirá en marca de la casa de futuros proyectos [de Mazzucheli]."
-- Sergio Córdoba, Noveno Arte #1
(Sergio es autor del excelente cómic Freaks in Love, y ganador del premio al Autor Revelación de 1998 en el Salón del Cómic de Barcelona)
"Dibujado extraordinariamente por David Mazzucheli, Batman Año Uno no sólo es la mejor versión del origen del señor de la noche, sino que será otro de los hitos que alterarían el panorama superheroico de mediados de los ochenta. (...) Es uno de los tebeos de superhéroes mejor dibujados de todos los tiempos. "
-- Trajano Bermúdez [1]
Frank Miller, el guionista
Frank Miller es uno de los autores más influyentes del cómic mundial de los años 80, conocido sobretodo por haber redefinido e insuflado nueva vida durante los años 80 a Daredevil y Batman, dos personajes "urbanos" emblemáticos de Marvel y DC, en los que ha trabajado repetidamente a lo largo de los años. Durante los 90 se ha dedicado principalmente a obras de creación propia entre las que destacan la serie de género negro Sin City y el cómic épico de ambientación histórica 300.
Frank Miller (1957, Olney, Maryland, EEUU) tuvo de chaval tres influencias que marcarían su producción historietística: la película El León de Esparta (The 300 Spartans, 1962), el Spiderman de Stan Lee y Steve Ditko y las novelas negras de Micky Spillane; entre las tres levantaron los conceptos de su particular concepción del heroismo, del drama y del sacrificio heroico, temas que aparecen repetidamente a lo largo de su obra.
Tras iniciarse en el mundo del cómic en fanzines, y realizar una serie de trabajos menores para Marvel y DC, en 1980 pasaría a encargarse de Daredevil, un personaje en el que dejaría una huella indeleble en una etapa de más de dos años (números 158 a 184, excepto el 162). Miller, empezó como dibujante de la serie y después realizaría también los guiones (a partir del 168), dando un nuevo enfoque al personaje y creando a Elektra, una ninja asesina de trasfondo trágico e interés romántico del protagonista, que se convertiría en uno de los personajes femeninos de Marvel más conocidos, a la par que iba introduciendo innovaciones narrativas.
En 1982 daría un paso adelante en su carrera escribiendo y dibujante la miniserie Ronin (DC Comics), un relato de ciencia-ficción mezclado con personajes del Japón medieval, que si bien no resultó un éxito comercial sí lo fue de crítica. A finales de 1982 retomaría la ambientación japonesa plagada de ninjas dibujando la miniserie Lobezno (luego recopilada como Lobezno: Honor) con guiones de Chris Claremont.
En 1986 volvería a Daredevil como guionista para contar la que está considerada como la historia definitiva del personaje en la saga "Born Again", con dibujos de David Mazzuchelli. Después de esto volvería a retomar a Daredevil y Elektra repetidamente en varios proyectos puntuales: Elektra Asesina (1886-87, miniserie con dibujos de Bill Sienkievicz), Daredevil: Love and War (1986, novela gráfica, de nuevo con Sienkievicz), Elektra Lives Again (1990, novela gráfica en solitario) y Daredevil: el hombre sin miedo (1993; miniserie con dibujos de John Romita Jr donde reescribe el origen del personaje, introduciendo en él a Elektra).
En 1986 un Miller en estado de gracia realiza Batman: el regreso del señor de la noche, que junto a la épica Watchmen de Alan Moore y Dave Gibbons harían historia revolucionando por completo el panorama del cómic en EEUU con un nuevo enfoque más adulto, "oscuro" y crepuscular de los superhéroes. Casi inmediatamente le sigue Batman: Año Uno, en la que redefine el origen el personaje, de nuevo con Mazzuchelli (Born Again) como dibujante. Con estas dos obras Miller no sólo marcaría de por vida el enfoque del personaje, sino que están consideradas como las dos mejores historias jamás contadas de Batman y representan el punto álgido de su carrera.
En los 90, ya con un estatus de figura mítica del cómic consolidado, Miller diversificaría su producción con diversas obras de creación propia para la editorial Dark Horse: Hard Boiled (con dibujos de Geof Darrow), Big Guy and Rusty the boy Robot (de nuevo con Darrow) y la saga de la mujer soldado Martha Washington (varias miniseries con dibujos de Dave Gibbons). Pero sería en Sin City, de nuevo como autor completo, donde volvió a convulsionar la industria como autor completo, retomando el ambiente del cine de género negro de los 40 y un estilo de dibujo en blanco y negro que juega con luces y sombras. A lo largo de los años 90 ha realizando regularmente historias de Sin City en prácticamente todos los formatos posibles (serial en revista, historias cortas, miniseries y novela gráfica), y logró poner en auge el género negro en EEUU, practicamente apartado en la industria estadounidense. En 1998 también sorprendería a propios y extraños con 300, un cómic de género histórico que narra la épica historia de los espartanos que combatieron en la batalla de las termópilas, y que sería uno de sus mejores trabajos de la década.
Ya entrado el siglo XXI ha vuelto a estar de actualidad al aceptar realizar para DC Comics varios trabajos sobre Batman: Batman DK2: The Dark Knight Strikes Again (2001-2002, una secuela de la obra que le dió más fama), DC All-Star Batman & Robin the boy wonder (2005-2006, con dibujos de Jim Lee, una historia sobre cómo Batman "recluta" a Robin para su "guerra" particular) y Holy Terror, Batman! (una novela gráfica con el terrorismo de Al-Quaeda, en la que todavía se encuentra trabajando, de la que ha finalizado más de la mitad), que sin embargo han recibido críticas dispares, con un amplio sector de críticas muy negativas. En este periodo también participó en la película de Sin City (acreditado como co-director) y se ha anunciado que ha aceptado dirigir una película de The Spirit, basado en el cómic del gran Will Eisner, uno de los grandes de la historieta mundial y amigo personal de Miller.
Como curiosidad, comentar que desde los años 80 es su esposa, Lynn Varley, la encargada de aplicar el color (con excelentes resultados) en los cómics que Miller realiza como autor completo. De sus obras de creación propia, se ha producido una adaptación cinematográfica de imagen real Sin City (2005) y 300 (2007), y una serie de TV de dibujos animados de Big Guy and Rusty the Boy robot.
David Mazzuchelli, el dibujante
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Daredevil #232 (Born Again) | Batman #405 (Año Uno) | La ciudad de cristal | Hombre Grande (detalle) | Discovering America (detalle) |
David Mazzuchelli (Providence, 1960) fue lector de cómics de niño y empezó a estudiar dibujo de muy joven, pero no fue hasta 1980, cuando estaba estudiando Bellas Artes en la universidad, cuando se planteó el medio como salida profesional, tras volver a "engancharse" con el Daredevil de Frank Miller. Entraría a trabajar para Marvel, donde, tras algunos números de prueba, se convertiría en dibujante regular de Daredevil (con guiones de Denny O'Neil) donde acabaría permaneciendo entre los números 206 y 233 (1984-1986), y progresivamente iría afianzando su estilo y llamando la atención. En sus siete números finales en la colección coincide con el breve retorno de Miller a Daredevil, esta vez sólo como guionista y mostrando su interés en colaborar con Mazzucheli. Así, entre los números 227 y 233 (1986) ambos realizarían entonces la que posiblemente sea la historia más memorable del personaje: Born Again y continuarían su colaboración en Batman: Año Uno, una historia de cuatro números publicada en Batman #404-407 (DC Comics, 1987), realizando en ambos títulos dos trabajos que marcarían a toda una generación de lectores y que influirian en muchos dibujantes jóvenes en la época de su publicación.
Mazzucheli se despediría de los superhéroes con una historia corta en Marvel Fanfare #40 (Marvel, 1998; "Claroscuro", 14 pgs sobre sobre la relación entre Ángel -miembro de los X-Men- y una anciana que lo encuentra moribundo y lo cuida). Desde entonces pasa a autopublicarse su propio comic, Rubber Blanket, del que publica solamente tres entregas entre 1991 y 1993, dando salida a sus intereses más personales en forma mayoritariamente de historias cortas y donde iría desarrolland un estilo progresivamente más expresionista, aunque variando para cada historia. Dos de las historietas de mayor extensión aparecidas en Rubber Blanket fueron Hombre Grande -Big Man- y Discovering America (de las que existen ediciones internacionales en álbum de unas 48 pgs cada una; en españa fueron editadas por la revista asturiana El Wendigo en 1993 y 1994, con difusión limitada).
Entre sus otros trabajos en los años 90 se cuentan colaboraciones con la revista Drawn & Quarterly, con la editorial japonesa Kodansha y especialmente La ciudad de cristal (1994), su trabajo más extenso de la década, una adaptación -junto con Paul Karasik- de la novela homónima de Paul Auster, un trabajo que el propio Auster suele recomendar. Mazzucheli también ha realizado diversas portadas para la prestigiosa revista The New Yorker y ha dado clases de "Comic Book Narrative, Storytelling and Illustration" durante varios semestres para el departamento de ilustración de la Rhode Island School of Design (para el curso 2005/2006 todavía aparecía listado entre el profesorado) donde él mismo estudió de joven (como curiosidad, comentar que uno de sus alumnos ha sido R. Kikuo Johnson, autor de Pescador Nocturno -La Cúpula, 2006-, cuyo trabajo tiene influencias evidentes de Mazzuchelli) y en la New York’s School of Visual Arts.
Repetidamente se ha informado en los últimos años que está trabajando en una nueva novela gráfica, cuya publicación, cuando finalmente se realice, será seguramente todo un acontecimiento.
En palabras de los autores
Mazzuchelli, hablando de la historia: "Batman: Año Uno es la historia de Bruce Wayne con 25 años poniéndose un disfraz de Batman por primera vez, y la historia de por qué lo hace y cómo funciona. También es en gran medida la historia de un teniente de policía llamado James Gordon, que es enviado a Gotham City como castigo por algo que hizo mal y que quiere compensar convirtiéndose en el mejor poli del mundo. Así que el obvio conflicto que va a suscitarse es entre el sentido de la ley de Gordon y el vigilante que aparece. Como es la "primera" historia de Batman, no hay otros superhéroes; se ha visto uno en Metrópolis [Superman], pero no es algo que a la gente le resulte familiar.
Alguien me preguntó: si ésta es la primera historia de Batman, al principio de su carrera, ¿es entonces cuando es más brutal? Mi respuesta fue no, probablemente es menos brutal.
Realmente es muy humanística. Trata sobre personajes y sus motivaciones y relacionaes más que otra cosa. La relación entre Gordon y su esposa embarazada es muy importante. Y por supuesto, la relación entre Gordon y Batman se convertirá en algo muy importante." [1]
Miller, sobre el Batman que protagoniza la historia: "El Batman de 55 años de El regreso del señor de la noche es muy distinto del de 25 años de Año Uno. Es muy joven, muy entusiaste. Puede que sea Batman en su momento de mayor alegría. Es un muchacho que ha esperado 18 años para ponerse a trabajar, y ahora va a empezar el trabajo. También es un Batman que comete un montón de errores." [1]
Miller, hablando de Mazzuchelli: "Hay un nivel de textura y credibilidad que David aporta a su trabajo que me convence constantemente de que lo que estoy leyendo está pasando. En Batman: Año Uno ha convertido en tridimensionales cada uno de los personajes, ha convertido en creíble cada situación. Encuentro las mayores virtudes de David en términos de drama y humanidad. Crea momentos que se viven. Cuando me llegan fotocopias de sus páginas acabadas, me encuentro hundiéndome en la historia, añadiendo mentalmente pensamientos que tienen los personajes y que no están en el texto. Cuando David dibuja al comisario Loeb, el comisario de policía corrupto de Gotham City, llena al personaje de un sentimiento de enfermedad: esas rayas abruptas y bruscas que parecen arrastrarse sobre la cara del hombre. La cara de Gordon, cuando ha sido golpeado con bates de béisbol en el primer número, es una máscara de dolor." [1]
Mazzucheli: "Daredevil fue algo así como mi estudio de licenciatura en los cómics, y Batman mi doctorado" [2]
Mazzucheli, hablando del traje de Batman: "Cuando me metí en este proyecto, busqué algunas de las historias más viejas para ver cómo le dibujaban al principio. Era una versión mucho más dura, mucho más pura, con mucho negro. Lo que yo decidí es que no me gustaba el azul en su disfraz. Imagino que al principio lo usaban como reflejo del azul sobre una superficie negra, pero al azul acabó dominando al negro. A mí no me parece que el azul vaya a tener el efecto que Bruce Wayne quería cuando creó el disfraz. Tal y como yo lo veo, Batman viste de gris y negro. Incluso el cinturón es gris, y no lleva ningún círculo amarillo alrededor del murciélago. Está intentando parecerse a un murciélago; no quiere parecer un personaje del arte pop.
Quiero que el disfraz parezca pesado y que parezca funcional. Funcional a pesar de la enorme capa, que, por supuesto, es para crear efecto. La sensación que quiero transmitir es la de que Bruce Wayne tiene un cuerpo grande y un físico muy bien desarrollado, y que el disfraz que lleva es un montón de equipo para llevarlo a cuestas, pero él lo hace muy fácilmente. Quiero la sensación de que si otra persona de un tamaño parecido se pusiera el disfraz, tendría dificultades para correr un par de manzanas, por no hablar de trepar edificios y saltar desde las azoteas. Le he puesto suelas gordas en las botas. Una vez más, busco lo que realmente tendría sentido." [1]
Fuente: http://guiadelcomic.com/comics/batman_anyo_uno.htm
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